«Desde este día comenzaré a engrandecerte ante los
ojos de todo Israel, para que entiendan que como estuve con Moisés, así estaré
contigo”
Josué 3:7
El libro de Josué es uno de los escritos más
relevantes de la Lealtad de Dios para con su pueblo. Narra el escenario donde
tienen lugar los nuevos actos del drama del pueblo de Israel, sus promesas
divinas y la lealtad de Dios fiel a su pueblo escogido.
También está lleno de estrategias, acciones
militares y triunfos que Josúe pudo realizar rápidamente en los territorios
cananeos; e incluso, estableció alianzas con invasores y tuvieron que aprender
a convivir en paz. Las conquistas del pueblo de Israel tuvieron muchos
inconvenientes pero con la ayuda de Dios, la penetración y las victorias fueron
como un relámpago.
La promesa de Dios para con Josué que está en el
Libro 3:7, es la misma que le ofrece a sus hijos, es la misma que TE OFRECE A
TI; busca engrandecerte, y siempre estará contigo; al referirme a engrandecer,
no se trata de dar reconocimiento y establecer dogmas de vida; es a Nombre de
ÉL, de Jesucristo, es que sea dada la Gloria.
No son conquistas hechas por ti, o por tus manos,
son conquistas de Dios; SU FIDELIDAD POR SIEMPRE está allí…..ahora tu fidelidad
a ÉL, está allí? Cumples con sus mandamientos?, está sobre tu corazón la tabla
real de su Ley, que es Jesucristo?
Es importante que nuestro accionar militar, es la
Palabra de Dios, esa es nuestra arma, allí están las estrategias, las tácticas,
el adiestramiento que Dios nos prepara para cada día; la pericia y las habilidades
van de la mano, como lo puedes ver también en el libro de Hechos de los
apóstoles,….que hermoso es servirle al Señor.
La enseñanza de la Palabra es esa, que establezcas
relación directa con el Señor, que comas el pan diario, Su Palabra, que
reconozcas que Jesucristo es nuestro Salvador, Él siempre estará contigo,
caminarás con ÉL, te enseñará tácticas, conquistarás tierras en que jamás
pensasteis estar, conocerás cosas que tu ojo nunca ha visto y escucharas cosas
que jamás has oído; toma la promesa,
porque Dios nunca desampara, ÉL siempre es FIEL, te lo puedo asegurar.
Dios te continúe bendiciendo.