Creo que cuando te sientas a
escribir sobre algo, debe estar enmarcado tu estado de ánimo, tus manifestaciones,
tus emociones, en un tema a tratar; así sabemos y conocemos la consideración de
quien escribe. Para aquel que quiere narrar una historia, una fábula, una
verdad, pues con seguridad leerá con anterioridad, se documentará y con
detalles expresara lo que siente.
Hoy, antes de encender mi portátil,
observé a mi esposa, a mi hija Sofía, a mi hijo Eliam, a mis padres, a algunos
amigos, en general a toda mi familia;…..y
me dije por un momento: Señor, Dios gracias por mi vida, gracias por la
vida de los que me rodean, bendícelos Padre amado, gracias, muchas gracias.
La acción de gracias a Dios, debe
ser diaria; los MILAGROS, si, MILAGROS que ha hecho Jesucristo en mi vida, en
la vida de los que amo, son REALES, son maravillosos. A ÉL proclamo Rey, su
Nombre sobre todo Nombre, porque me ha dado la Victoria.
La vida está llena de obstáculos, de
vallas que hay que saltar; de duras pruebas, de grandes retos, de metas por
alcanzar; he sobrepasado impedimentos, he brincado las barreras, he persistido
las dificultades, he superado metas, he alcanzado la victoria diaria, NO por mi
propia cuenta, sino porque Cristo ha sido fiel y por Él estoy escribiendo estas
palabras.
Hoy doy gracias a Dios, a
Jesucristo, al Espíritu Santo que nos ha dado; Gracias Señor por la salud, por
el pan diario, por las promesas cumplidas y por cumplir, porque Grande eres
Dios de Israel.
No me cansaré de decir; Gracias
Dios, Gracias.
Dios les bendiga.
