domingo, 28 de septiembre de 2008

CUAL ES EL CONTROL DE TUS GANANCIAS.


La satisfacción y envanecimiento por la contemplación de las propias prendas con menosprecio de los demás es algo que aborrece el Señor. Cuando llega la soberbia, llega también la deshonra. Proverbios 11:2.

Muchos empresarios tienen el corazón habituado en la codicia; el afán excesivo de las riquezas turba la razón y ofusca el entendimiento.

Pero ellos a su propia sangre ponen asechanzas, contra sí mismos tienden la trampa. Así son las sendas de todo el que es dado a la codicia, la cual quita la vida de sus poseedores. Proverbios 1:18.

La administración eficaz y razonable de los bienes debe estar ligada a los preceptos que dice la Palabra de Dios. Las dadivas entregadas con alegría de corazón, la organización especial de los bienes, el desempeño y distribución de los mismos debe estar enfocada a la Sabiduría de Dios. Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan? Lucas 11:13.

La generosidad, el dar desinteresadamente está ligado con tu experiencia de crecimiento, de éxitos. Nuestro Señor Jesucristo mira el corazón de las personas, miró el corazón de aquellos reyes a los cuales les dio riquezas. Antes que nada estimado amigo, pide Sabiduría y las otras cosas serán añadidas:

»Y tú, Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre, y sírvele con corazón perfecto y con ánimo generoso; porque Jehová escudriña los corazones de todos, y entiende todo intento de los pensamientos. Si tú le buscas, lo hallarás; pero si lo dejas, él te desechará para siempre. Mira, pues, ahora, que Jehová te ha elegido para que edifiques Casa para el santuario; ¡esfuérzate, y hazla!..

Salomón es un claro ejemplo de administración y control de finanzas. El Señor le dio lo que necesitaba. Salomón pidió sabiduría y el Señor agregó bendiciones para él.

El mensaje es dirigido a Maestros, Pastores, Evangelistas, Profetas y Apóstoles de Nuestro Señor Jesucristo.

El ruin nunca más será llamado generoso

ni el tramposo será llamado respetable.

Porque el ruin habla ruindades

y su corazón maquina iniquidad,

para cometer impiedad

y para decir blasfemias contra Jehová,

dejando vacío al que tiene hambre

y privando de beber al sediento.

Isaías 32:5-6.


Cristo te ama.

1 comentario:

Anónimo dijo...

no pare su oracion por mi senor gracias