martes, 24 de noviembre de 2009

QUE ENTIENDAN LOS SABIOS: PREDOMINIO SOBRE LAS NACIONES


En la nación en que vives, predomina una autoridad terrenal. Dicha autoridad tiene un lugar, un poder, un puesto destacado entre su pueblo. Los poderes a veces están bajo el mando de una sola persona, o de varias. Gobiernos, monarcas, cámaras, reyes etc; existen diversas formas de jefaturas,… y sus representantes establecen sus leyes.

Pocos gobernantes saben que por encima de ellos, hay algo más destacado que los rige y representa; y aparte de todo lo anterior, existe algo mucho más importante que está sobre Todo Nombre, es Nuestro Dios, el Dios de Israel.
Pues bien, algunas veces, los conflictos entre las naciones son presididos por “dominios” que no tienen nada que ver con las leyes terrenales. Supuestos “protectores” que siembran odio, destrucción, engaño y muerte. Podría llamárseles guardianes de un pueblo o una nación. Un ejemplo lo encontramos en el Libro de Daniel. Un libro que está relacionado con el libro de Apocalipsis (Revelaciones).

Daniel tuvo una revelación verdadera, pero con un significado difícil de entender. No quiero ir al trasfondo, tan solo voy a tocar lo concerniente al tema. Veamos Daniel 10:2.

En aquellos días, yo, Daniel, estuve muy triste durante tres semanas….. 5De pronto, me fijé y vi un hombre vestido con ropas de lino y un cinturón de oro puro. 7“Solo yo pude ver la visión, pues los hombres que estaban conmigo no se dieron cuenta de nada, porque el miedo se apoderó de ellos y corrieron a esconderse…………. 9Cuando le oí hablar, caí desmayado y quedé tendido en el suelo…... . 11Luego me dijo: ‘Daniel, a quien Dios ama, escucha bien lo que te voy a decir: levántate; porque yo he sido enviado a ti.’

“Tan pronto como terminó de decir estas palabras, yo, tembloroso, me puse de pie. 12Entonces me dijo: ‘No tengas miedo, Daniel, porque desde el primer día en que trataste de comprender las cosas difíciles y decidiste humillarte ante tu Dios, él escuchó tus oraciones. Por eso he venido yo. 13El ángel príncipe del reino de Persia se me ha opuesto durante veintiún días; pero Miguel, uno de los ángeles príncipes más altos, vino en mi ayuda, pues yo me había quedado solo junto a los reyes de Persia…. 15“Mientras me decía esto, yo estaba con la mirada fija en el suelo y sin decir una sola palabra……..18“Aquel que parecía un hijo de hombre me volvió a tocar, me dio nuevas fuerzas 19y me dijo: ‘No tengas miedo ni te preocupes. Dios te ama; ¡anímate y ten valor!’“Mientras me hablaba, sentí que me iba reanimando, y dije: ‘Señor, háblame, pues me has devuelto las fuerzas.’ 20Entonces me dijo: ‘¿Sabes por qué he venido a verte? Pues porque ahora tengo que volver a luchar con el ángel príncipe de Persia. Y cuando haya terminado de luchar con él, vendrá el ángel príncipe de Grecia….


Estos ángeles llamados “príncipe de Persia” y “de Grecia”, son potestades que aún rigen en esos países y que por obvias razones están dividiendo los entornos sociales y políticos en la tierra.

Si miramos la perspectiva mundial en estos momentos vamos a encontrarnos con muchos asombros. Los conflictos que aún permanecen se vienen relacionando precisamente con esas potestades que existen en esos pueblos. Cada gobernante, cada monarca, arrastra consigo el “dominio” que rige en su nación. Basta con ver a tantas ciudades, tantas villas y poblaciones con su situación social.

Creo que muchos sabrán relacionar a Irán con Persia o al mundo occidental con Grecia.

Acordémonos que Dios quita y pone reyes. “El muda los tiempos y las edades; quita reyes, y pone reyes; da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos. 22El revela lo profundo y lo escondido; conoce lo que está en tinieblas, y con él mora la luz

Aunque parezca difícil para muchos cristianos, debemos orar los gobernantes.

Ante todo recomiendo que se hagan peticiones, oraciones, súplicas y acciones de gracias a Dios por toda la humanidad. 2Se debe orar por los que gobiernan y por todas las autoridades, para que podamos gozar de una vida tranquila y pacífica, con toda piedad y dignidad. 3Esto es bueno y agrada a Dios nuestro Salvador, 4pues él quiere que todos se salven y lleguen a conocer la verdad. 5Porque no hay más que un Dios, y un solo hombre que sea el mediador entre Dios y los hombres: Cristo Jesús.

En el Nombre de Jesús.


Dios te continúe bendiciendo.

domingo, 15 de noviembre de 2009

SU GRACIA EN TÍ


Sin duda alguna, cuando te miras al espejo ves algo muy bello, realmente bonito; muchos sonreirán, o tratarán de interponer un elemento de duda en su semblante; por lo menos eso dice mi esposa cuando me levanto sin haberme afeitado el día anterior.


Pero aquí lo importante es, que cuando te miras al espejo, ves una hermosa criatura de Dios, hecha para un propósito aquí en el planeta.


En muchas personas Dios ha puesto su “gracia”. La palabra “gracia” viene del griego (járis); el equivalente a “jaris” en el hebreo es el sustantivo “hen” que enuncia la idea de “favor o benevolencia”. En la antigüedad hablar de la gracia era hablar de cortesía, encanto etc; por otro lado se empleaba para describirse a algo bondadoso, algo que tenía un carácter compasivo. Algunos creían y aun creen que la gracia es una fuerza recóndita; pero no.


Permíteme decirte que la gracia la podríamos definir como la presencia especial de Dios en ti. Es la intervención que Dios tiene en ti, cuando estas oprimido; es el favor inmerecido que Dios pone en ti. Por medio de ella es que Dios obra; es por eso que Pablo dice que su gracia fue dada en Cristo Jesús.


La gracia puede ser lo más agradable que tenga el débil. Es lo que lo hace grato. Por ejemplo, a Jacob ante Esaú, a José ante el faraón, a Rut ante Booz, y otros ejemplos más.


La palabra dice que Dios mostró su favor para con su pueblo Israel. A pesar de ser un pueblo terco y desobediente, la misericordia de Dios siempre estuvo presente.

Por medio de la Gracia es que tú sales adelante; no con tus propias fuerzas, sino por medio del Amor de Dios.


En Lucas 2:40 encontramos una de las descripciones perfectas de Jesús: "El niño crecía y se fortalecía, se llenaba de sabiduría y la gracia de Dios era sobre él".
Dios nos muestra que nos orienta por medio de Su gracia divina. Nos sitúa hacia los oprimidos, a los pecadores, para ayudarles, para que se arrepientan y conozcan de Su palabra.


No es tu actitud amorosa, no es tu obrar generoso; es la Gracia de Dios en ti. Mira tu rostro a un espejo, por muy risible que pienses que sea, en el lugar donde te encuentres, en la situación por la que estés pasando, Dios está en ti y saldrás adelante.


Ni el conocimiento o belleza terrenal, podrán estar por encima de ese favor inmerecido que recibimos de Dios, Su gracia; Su gracia, la que nos alienta, nos hace seguir adelante, nos da la sabiduría de lo alto, la que abre puertas, rompe cadenas y excede todo amor.


Gracias por tu Gracia Señor Jesucristo. Gracias.


Dios te continúe bendiciendo.

domingo, 8 de noviembre de 2009

DIOS HIZO EL MAR Y TODO LO QUE EN ÈL HAY

Hace un tiempo, estuve con mi familia en la playa. Por primera vez mi hija visitaba el mar. Aquí en la foto estoy con ella. En sus once mesecitos sus ojitos estaban asombrados al ver tan admirado paisaje. Fui y la tomé entre mis brazos y nos acercamos sobre la arena.

Le susurré al oído. Oramos en ese momento. Le dije muchas cosas, y su ceño fruncido denotaba que posiblemente algo me entendía. Quizás me decía: Papá estás loco ¡ o Papá mucha agua asusta ¡…



Le dije que hace mucho tiempo Dios ordenó que se reunieran las aguas debajo de los cielos en un solo lugar, para que se descubriera lo seco; y a la parte seca la llamó tierra y al conjunto de aguas lo llamo mares. Y vio Dios que todo era bueno.


Que en vuestras manos los pecesitos del mar habían sido entregados.



También le explique que hubo un hombre llamado Moisés que extendió su mano sobre el mar e hizo Dios que las aguas quedaran divididas.



Que Dios había enviado un viento que trajo codornices del mar y las dejó cerca de un campamento.


Le expresaba que los cielos se alegran, la tierra se goza y resuena el mar en su plenitud cuando Dios Reina. El campo se alegra y los arboles de los bosques cantan.


Que Dios junta a montón las aguas del mar, las pone en orden y fija sus límites para que no desobedezcan su mandato.


Que aquellos marinos que descienden al mar en naves y hacen negocios en sus aguas, ellos ven las obras de Dios y sus maravillas en las profundidades.

Y por sobretodo,que hubo un hombre que reprendió al viento y al mar hasta dejarlos en calma; que anduvo sobre el mar, un hombre que fue, Es y será; un hombre que tiene Nombre sobre todo Nombre, que dio su vida por nosotros, que nos dio la Salvación y selló por siempre en nosotros un espíritu de amor,.. Que derramó sobre nosotros el Espíritu Santo….un hombre llamado Jesucristo.

Al final enmudecí, quizás contrito. El momento de silencio era de los dos. No sé si mi niña comprendía. Sus manitas tocaban mis lágrimas; quizás percibía una señal. Quizás el sonido de las olas, el fuerte viento anunciaban nuevas cosas.

Luego sus manitas fueron a mi pecho, y así entendí que tenía que conducirla hacia mi esposa.

Lo cierto de todo es que fue un día sensacional.

Dios los continúe bendiciendo.